martes, 9 de noviembre de 2010

4 técnicas básicas de relajación


Cuando tenemos una meta que cumplir, ya sea entregar un proyecto o presentar una evaluación, el estrés es un personaje que puede hacerse presente en nuestras vidas y si no tomamos conciencia de él, podría llegar a dominarnos.

Practicar la relajación debería ser una tarea de cada día, en especial si vivimos en una ciudad o tendemos a estresarnos. Así que si deseas tranquilizarte, practica estás técnicas básicas de relajación:

1. Respiración profunda
Inspira profundamente mientras cuentas mentalmente hasta 4. Mantén la respiración mientras cuentas mentalmente hasta 2. Suelta el aire mientras cuentas mentalmente hasta 8. Repite el proceso anterior dos veces.

2. Pensamiento adaptativo
Cuando empieces a encontrarte incómodo, nervioso o alterado, préstale atención al tipo de pensamiento que estás teniendo, e identifica los que son poco útiles para tus fines (centrados en el fracaso, odio, culpabilización…). Di para ti mismo: ¡basta! Sustituye estos pensamientos por otros más útiles y agradables.

3. Relajación muscular
Siéntate cómodamente y cierra los ojos. Imagina que estás en el campo, sólo escuchas el viento. Todo es tranquilidad. Intenta notar como destensas lentamente los músculos de tu cuerpo. Empieza relajando los pies y llega hasta los múculos del cuello y la cabeza.

4. Visualización
Cierra los ojos e imagina que estás en la situación de tu meta (proyecto, evaluación, examen, etc.). Piensa que lo estás haciendo bien. Te sientes relajado y seguro. Regula tus pensamientos: “Todo va a salir bien”. Practica la técnica de relajación.